Ando retrasada. Quería haber publicado esta receta en septiembre cuando todavía la temporada de nectarinas no ha tocado su fin. A ver si hay suerte y todavía puedes comprar unas nectarinas maduras pero firmes y puedes hacer esta receta porque es muy resultona y apenas tiene complicaciones.
La idea original de la receta la encontré en la revista de GoodFood, agosto del 09. La puedes adaptar a tu fruta favorita, con unos buenos melocotones también queda estupenda. Con estas cantidades que te propongo te sobrará relleno, pero eso no es problema. En casa solemos tomarlo como acompañamiento al yogur natural por eso me gusta que sobre.
Para servir, existen varias opciones. En casa lo tomamos en su propio jugo, sin más, pero las nectarinas también se pueden acompañar de una bola de helado favorito o un poco de nata montada.
NECTARINAS HORNEADAS
Ingredientes:
· 125 ml vino tinto
· 2 cucharaditas de miel
· 4 nectarinas
· 100 g galletas
· 1 yema de huevo
· 1 cucharada de almendras fileteadas
· 1 cucharada de azúcar moreno
· 1 cucharada de mantequilla
· Media ramita de canela
· 100 g frambuesas
Así lo hago yo:
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Mezclamos el vino con la miel. Removemos bien y reservamos.
- Lavamos y secamos las nectarinas. Las abrimos por la mitad y quitamos el hueso.
- Trituramos las galletas y las mezclamos con la yema de huevo , 2 cucharadas de la mezcla de vino y miel y las almendras fileteadas.
- Ponemos las nectarinas en un recipiente apto para el horno.
- Espolvoreamos cada pieza de fruta con un poco de azúcar moreno.
- Rellenamos cada nectarina con la mezcla de galleta.
- Ponemos un poco de mantequilla sobre el relleno.
- Vertemos el vino en la fuente, con cuidado de no echarlo sobre la fruta.
- Colocamos la ramita de canela en el vino.
- Horneamos 30 m
- Sacamos del horno, colocamos las frambuesas en el líquido y dejamos templar.
- Servimos como más nos guste: con helado, yogur, nata…
¡ Que te aproveche !
Bienvenid@
Con frecuencia, abría la ventana de su cocina y dejaba enfriar en la repisa una bandeja. Si la brisa era importante, el olor a recién hecho, podía llegar hasta muy lejos. Pan, bizcochos, quiches, bollos… olores que dejaban constancia de la actividad de aquella mujer. Había veces que no coincidía con ella en muchos días pero sabía que estaba allí, al fijarme en la repisa de su ventana...
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Qué ricas las nectarinas y así preparadas, me comía unas cuantas bien a gusto!!!
ResponderEliminarBesos
mmm me parece un postre delicioso el que has hecho, me encantan las nectarinas y nunca se me había ocurrido hornearlas, qué buenas! me llevo tu idea :) un besuco
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